La Ruta de los Pueblos Negros es conocida principalmente por lo peculiar de su arquitectura. Pero… ¡ojo!, no nos olvidemos que el entorno en el que se encuentra esta parte de la Sierra Norte de Guadalajara, nos muestra una naturaleza en estado puro.

Eventualmente, con las grandes nevadas invernales, la Ruta de los Pueblos Negros es el escenario ideal para la práctica de raquetas de nieve.

Una de las actividades que podemos realizar para disfrutar de esas montañas de la Sierra de Ayllón, es el senderismo con raquetas de nieve. Se trata de una actividad muy sencilla de aprender (el nivel básico) y que aporta muchas de las ventajas de otros deportes al aire libre.

Una actividad tan antigua como esta nos permite progresar en nieva blanda y profunda de manera cómoda y rápida. Básicamente en una ruta con raquetas de nieve lo que hacemos es andar de una manera algo diferente y con la ayuda de unos bastones (mejor que sean telescópicos). Simplemente es acostumbrarse a andar con los pies algo más separados (para que no se toquen las raquetas) y levantando más las rodillas (para que no nos trabemos en la nieve). La ayuda que nos aportan los bastones es de vital importancia, sin ellos, todo el esfuerzo se lo llevarían nuestras piernas… ¡y glúteos! Los bastones aportan ritmo y equilibrio, así como estabilidad en bajadas y subidas.

 El camino al Ocejón nevado es un lugar idílico con raquetas de nieve

Cualquiera que haya intentado andar sin raquetas por nieve blanda y profunda, habrá sufrido en sus carnes lo complicado (¡y agotador!) que es avanzar por este tipo de superficie. Ya el hombre primitivo usaba estos artilugios, pero evidentemente han ido evolucionando y en estos momentos podemos encontrar diferentes tipologías y modelos.

• Las raquetas universales son las más sencillas, se pueden utilizar con cualquier bota y se unen a ellas con correas.
• Las raquetas automáticas solamente se pueden utilizar con una bota especial, pero son más rápidas de poner y quitar y se trata de un sistema más seguro. Dentro de esta categoría hay unas más evolucionadas y ligeras, el sistema step in.

En ambas categorías existe una articulación que permite que el movimiento de nuestras piernas sea mucho más cómodo, dicha articulación se puede fijar (bloquear) en caso necesario, como en las bajadas muy pronunciadas.

Otros elementos importantes de las raquetas son:

• El alza: pieza bajo el talón que facilita mucho las subidas pronunciadas. Se puede usar a voluntad.
• Los crampones: lejos de ser como los de andar por hielo o nieva muy dura, son unas estructuras metálicas que mejoran mucho el agarre en nieve más firme y pendientes pronunciadas. Es importante insistir que nunca debemos usar las raquetas en el hielo.

Gracias a las raquetas, conseguimos esa flotabilidad necesaria para disfrutar de rutas más o menos técnicas en entornos nevados. Evidentemente, a mayor tamaño de la raqueta, mayor flotabilidad, pero a cambio se dificultan nuestros movimientos debido tanto a su tamaño como a su peso.

Por lo que estamos viendo, no es lo mismo ir por un tipo de terreno que por otro, resumiendo mucho podríamos decir que:

• LLANEANDO: el talón va libre, sin levantar mucho el pie, que la raqueta se deslice sobre la nieve. Un error muy común es dar zancadas largas, mucho mejor pasos cortos.
• BAJANDO: si es suave la pendiente, también puede ir la raqueta desbloqueada; si es pronunciada, mejor bloquear y dar pasos muy cortos.
• SUBIENDO: utilizamos el alza y estamos pendientes de que los crampones tengan buen agarre. Si la subida es muy larga, mejor hacerlo en zig-zag.

A la hora de elegir unas raquetas de nieve tendremos que tener en cuenta varios aspectos como son: el tipo de ruta, el peso corporal, la frecuencia de uso y el tipo de nieve. Como en cualquier actividad en la montaña, deberemos tener las siguientes precauciones:

• No ir nunca solos.
• Ver siempre la previsión meteorológica.
• Informar a amigos/familiares del itinerario (y hora aproximada de finalización).
• Elegir la ruta adecuada para nuestro nivel, bueno, concretamente para el de la persona con menos experiencia

Respecto a la ropa y el equipamiento aconsejable para este tipo de deporte invernal, no olvidemos vestir con las 3 capas clásicas de montaña (camiseta manga larga transpirable, forro polar y capa externa cortaviento e impermeable). Para completar, nos quedaría un pantalón con membrana transpirable, unas botas y unas polainas. Los complementos indispensables son unas gafas de sol, unos guantes y un gorro.

Esta práctica invernal podremos disfrutarla en la Sierra Norte de Guadalajara en parajes como las faldas del Pico del Lobo, del Alto Rey y del Pico Ocejón, en los alrededores de Tamajón, en el valle del Sonsaz, en Cantalojas y Galve de Sorbe, y en los fabulosos e imponentes pinares de Condemios de Arriba.

Cuando los pueblos negros se cubren de nieve y prácticamente desaparecen los colores…, una ruta por ejemplo entre Majaelrayo y Campillejo, se convertirá en una película antigua…, en una película en blanco y negro.